Las 5 características que no pueden faltar

Como todo cargo de alta responsabilidad, y así como muchos colombianos hemos pasado por rigurosos procesos de selección, recomendamos que se haga un examen de conocimientos, habilidades, aptitudes, capacidades y valores, al próximo/a Ministro/a de Educación y sea escogido por tener las siguientes características:

 

1. Que sea un duro

Conocimiento en la gestión del sector educativo y sus retos

 

• En cuanto a las temáticas: El sistema educativo Colombiano es muy complejo, necesitamos una persona que conozca y comprenda los principales retos, avances y desafíos que tiene el sector, desde la primera infancia hasta la educación superior, formación para el trabajo y desarrollo humano. Que tenga una visión amplia hacia la renovación del sector y esto no se trata simplemente de importar lo que otros países hacen bien, sino de revisar qué funciona acá y de entender las dinámicas y particularidades de los territorios. Que dimensione todos los otros derechos que se realizan a través de la educación y las libertades ganadas que no tienen vuelta atrás en términos de educación para la ciudadanía, la valoración de la diversidad y la sexualidad, entre otros.
• En cuanto a la forma de trabajo: Dicho conocimiento trae consigo que el/la próximo/a Ministro/a, tenga la capacidad de conformar un gran equipo de trabajo, que le ayude a encontrar un sano equilibrio entre los avances realizados por otros gobiernos y que a la vez, permita implementar las estrategias para resolver con eficacia y eficiencia los retos más urgentes del sector como la ruralidad, el cierre de brechas y la evaluación permanente del sector.
• En cuanto a la gestión del sistema: Que conozca de cerca los enormes retos del proceso de descentralización, en términos de financiación, fortalecimiento de las secretarías de educación y de los establecimientos educativos. Es decir, que genere puentes y vínculos con los territorios para que las políticas y programas respondan a las particularidades de los mismos. Además, que tenga muy cuenta los problemas estructurales que limitan las transformaciones que se tienen que dar, como la forma en que está organizado el sistema educativo, los alcances y limitaciones de la Ley 715 de 2001, la distribución del sistema general de participaciones, la precaria reorganización de las Instituciones Educativas, los enormes retos de la formación inicial y en servicio de los maestros y el rol del Ministerio de Educación como orientador de política.

 

2. Que le encante el trabajo en equipo

Habilidades para articular el sistema educativo con actores sociales,educativos, padres de familia, sindicatos y el Congreso de la República.

 

Necesitamos un líder de la cartera, que escuche y se deje aconsejar, es cierto que la gestión del sistema le corresponde única y exclusivamente a él o ella; pero deberá y debido a la misma complejidad de gestión del mismo, tener la capacidad para el trabajo intersectorial y para la construcción de alianzas con organizaciones privadas, la banca multilateral, la academia, los sindicatos, los jóvenes y movimientos sociales.

 

Estas capacidades de diálogo incluyen además, todas las habilidade políticas en el buen sentido de la palabra para su trabajo con el legislativo en 3 frentes: i) un buen plan de desarrollo, con metas cumplibles y articulaciones correspondientes ii) provisión de los recursos para el sistema educativo, los cuales deberá defender cada año en la aprobación del presupuesto público iii) las reformas del sistema mediante la expedición de las normativas correspondientes; todas ellas requieren de una Bancada comprometida con la educación.

3. Que no sea corrupto/a

Buenas prácticas y transparencia

Debe ser una persona que entienda que los recursos públicos de la educación son sagrados y tenga como principio de su gestión, promover su cuidado, implementando las medidas y estrategias para prevenir las fugas de recursos y sancionar con mando dura aquellos que quieren desangrar al sistema.

4. Que sea un Innovador y con espíritu joven

Un espíritu jóven no necesariamente implica tener pocos años y experiencia; el espíritu jóven hace referencia a la mentalidad con que el próximo líder de la cartera debe enfrentar los retos, es decir con apertura, con total conexión con los niños, niñas y adolescentes de Colombia sus contextos y realidades; que comprenda que el sentido de la educación es formar personas integrales y felices que mediante su paso por una institución educativa están cumpliendo su proyecto de vida; que dimensione que la educación de hoy, no responde 100% a estas necesidades y por lo tanto, sea arriesgado en las reformas, para que la educación de Colombia esté a la altura de los retos del mundo actual, y que dichas reformas se hagan con toda la rigurosidad, cuidado y visión.

5.Que la tenga clara

Visión del corto y el largo plazo:

 

Es comprensible que el líder de esta cartera, ante los enormes retos, decida priorizar sus metas de gobierno en tanto solo tiene 4 años para lograrlo, pero esto no debe competir con una visión a largo plazo de las metas trazadas y que haga todos los esfuerzos por ir consolidando políticas públicas educativas que apunten a que en largo plazo, el país avance hacia las transformaciones significativos que el sector necesita.